A partir de avances de materiales para ventanas y paredes, es posible llegar al nivel de acustización que uno busca.
Hoy queremos contarte sobre otra manera de lograr esto. Se trata de la utilización de techos suspendidos, que además de su evidente aporte estético, habilitan una oportunidad para el diseño creativo y la integración técnica.
Este tipo de soluciones abiertas permiten crear un diseño versátil que se ajusta a la necesidad de cada espacio. Permite la integración de sistemas de iluminación, rociadores anti-incendios, circulación de aire e instalaciones de wi-fi.
Yendo a la parte más estética, los materiales serán los que definan el tono de este elemento. Se puede utilizar madera para darle mayor calidez o terminaciones metálicas para darle un enfoque de mayor precisión.
La acustización se logra a través del tamaño de las perforaciones en el techo, el espacio modular y el material acústico utilizado. Se ha relevado un coeficiente de reducción sonoro de entre 0.70 y 0.95.
La escala utilizada siendo 1 = toda la energía sonora incidente es absorbida, mientras que 0 = toda la energía es reflejada.
Así que si estás pensando o trabajando en un proyecto que requiera aislación acústica, te recomendamos que barajes los techos suspendidos como una opción viable que funciona a nivel técnico y estético.