The Edge, en Ámsterdam, es oficialmente el edificio de oficinas más ecológico del mundo. También es el campo de pruebas para una nueva forma de trabajo radical y altamente conectada, donde los empleados no tienen espacios de trabajo establecidos y pueden marcar sus preferencias individuales de clima e iluminación a través de una aplicación. Tom Randall de Businessweek pudo ver de primera mano el funcionamiento interno de esta oficina del futuro.