El arquitecto Ieoh Ming Pei, más conocido como I.M. Pei, murió a los 102 años. Tildadas muchas veces de polémicas, sus obras jugaban con los límites de lo clásico y lo innovador. En Arch360, hacemos un recorrido por sus propuestas más emblemáticas.
Ieoh Ming Pei se volvió, con los años y la trayectoria, simplemente I.M. Pei. Conocido tanto por sus propuestas, que se volvieron íconos, como por su sonrisa tan tranquila como desafiante, Pei se convirtió en un oxímoron de la arquitectura: era clásico y moderno al mismo tiempo y hacía reaccionar a simpatizantes y detractores con cada una de sus obras. Tras su muerte, a los 102 años, en Arch360 recordamos sus obras más destacadas.
“La arquitectura es el espejo de la vida: solo hay que mirar los edificios para sentir la presencia del pasado, el espíritu de un lugar. Son el reflejo de la sociedad”. Así definía su modo de ver el mundo. Nacido en China, Pei viajó a estudiar a Estados Unidos, donde pasó la mayor parte de su vida y donde también dejó casi todo su legado: allí se formó, fue docente en Harvard y adquirió la nacionalidad poco antes de fundar su primer estudio: “Pei and partners”. Pei solía comparar la arquitectura con la música: “La arquitectura es eso: la armonía entre la estructura y el espíritu del espacio, como la música. Es una repetición con particularidades”, definía. Y siempre destacó la “esencia” en sus proyectos: “Es lo que queda, lo otro desaparece”. Prefería los materiales fríos como el acero, el cemento y el vidrio; y las formas lineales. En 1983 recibió el mayor reconocimiento internacional para arquitectos: el premio Pritzker.
Aquí, una recorrida por algunos de sus trabajos más recordados.
La pirámide que da la bienvenida al museo Louvre, en París
Es su obra más recordada y polémica, inaugurada en 1989. En ese momento, cuando el presidente francés lo convocó y se anunció el proyecto, las reacciones fueron de sorpresa y mayormente negativas. Pei lo recordaba así: “Mi primera reacción fue ‘No puedes tocar el Louvre, simplemente no puedes tocarlo, es un sacrilegio’. Cuando presenté la primera idea, estaba seguro de que me rechazarían. Pero no fue así”.
Salón de la fama del Rock and Roll, en Ohio
Diseñado en 1995, el museo reúne recuerdos y memorias de los músicos más conocidos en Estados Unidos. Pei volvió a mostrar su preferencia por las formas geométricas y los materiales: el lugar es una pirámide doble, cerrada con cristal.
Embajada de Montevideo, en Uruguay
Es la única obra de I.M. Pei en Latinoamérica. Actualmente está en obra de reforma, pero respetarán la estructura original ideada por el arquitecto.
China Tower, en Hong Kong
Pei volvió a su país convertido en arquitecto e ideó este rascacielos icónico de Hong Kong. Su forma triangular y hexagonal lo vuelve particularmente reconocible.
Museo de arte islámico de Doha
Lo inauguró en 2008 y fue una de sus últimas creaciones. Como no conocía el lugar ni había tenido mucho contacto con la cultura, Pei decidió viajar para seguir cumpliendo su premisa: capturar la esencia de las sociedades donde iría a trabajar.
