¿Qué es la metodología BIM? Hay distintas variantes de pensamiento para definirla. Una de ellas, habla de un conjunto de procesos que nos ayudan a combinar la geometría de un proyecto con los datos necesarios para completar la totalidad de su ciclo de vida. Podríamos decir que modelar en BIM es como ejecutar la construcción de una manera virtual.
Otro aspecto importante es que permite la colaboración entre distintas partes del proyectos y las personas involucradas para que todos tengan el mismo acceso a la información, simplificando el flujo de trabajo.
Normalmente, cuando se calcula la ejecución de un proyecto, es un proceso que lleva varias etapas y que puede cambiar en cada una de ellas. Esto se debe a que si no se logra tener mediciones minuciosas al momento de presupuestar, esto puede traer un incremento innecesario de costos.
Optimizando BIM
¿Imaginas diseñar un nuevo proyecto y crear automáticamente sus partidas, sus mediciones y, en consecuencia, su presupuesto? Si jugamos bien nuestras cartas desde un principio, todo esto puede ser posible.
Con BIM podemos tener una medición correcta del proyecto desde el principio debido a que cada elemento modelado significa una actividad de construcción y por lo tanto, si desde un inicio seguimos una estrategia lógica de modelado, podemos obtener cantidades precisas de materiales. Aquí la colaboración es clave para que los distintos profesionales que participan en el proyecto brinden su ojo analítico si es que se requiere hacer cambios en el proyecto.
Sin embargo, antes de modelar, es necesario reunirse y acordar dichas estrategias para poder sacar el mayor provecho de los modelos BIM.
Como todos sabemos, BIM no hace magia por su cuenta y es necesario complementarlo con otras tecnologías como por ejemplo Autodesk Revit para realizar nuestras diferentes partidas y así obtener las estimaciones en el campo de los proyectos de demolición y reconstrucción, construcción desde cero, diseño de cimentaciones, esqueletos estructurales y revestimientos entre otras muchas otras aplicaciones.
Aunque la tecnología no permita nunca suplantar la creatividad de la mente humana, sin lugar a dudas ha pasado a ser una parte integral en la arquitectura.